El bien y el mal

Mientras las cosas están en un orden, a veces simuláis otras situaciones no gratas para la convivencia.

Mientras no veáis las cosas como son, no avanzaréis lo suficiente como para poder evolucionar y llegar a realizar cosas buenas para vuestro crecimiento.

Discernir el mal del bien no es cosa que se pueda  especular. Los humanos a veces no sabéis como son las cosas y a qué habéis ido a la Tierra.  Aceptaréis tal como son a las personas. Unas han ido a vivir bien, otras en cambio tienen que  trabajar en cosas que no hicieron en otras vidas y tienen que cumplir su misión para evolucionar.

No es muy grato  criticar. Cada uno  hará y vivirá su vida como quiera y no hay que especular.

El bien ajeno es muy esperanzador y deseable para los que conviven y se aman. En cambio el mal ajeno es destructible y llega a separar.

En verdad os digo que hay que cumplir con lo estipulado por vuestras vidas y no pensar en que vuestra vida es buena o mala.

Avanzaréis más si dejáis de influenciar y de discernir.